La alimentación es una "bosta"

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“¿LA ALIMENTACIÓN ES UNA BOSTA?”

 

Servicio de Alimentación SERAGRO

 

 

 

Entre las muchas herramientas para evaluar y monitorear la nutrición de una vaca de leche, el control de sus heces y el estado de las mismas es una herramienta muy eficaz. Podríamos decir, haciendo referencia al título de este artículo que: “el funcionamiento de la Alimentación se puede ver en la Bosta”. Evaluando las bostas podemos obtener información sobre el estado general del animal, la salud ruminal e intestinal, el estado de la fermentación en rumen, y la evolución de la digestión de alimentos por parte del animal.

 

Las vacas adultas generalmente excretan cada 1,5-2 horas, y alrededor de 50 kg diarios, dependiendo, dicha cantidad de la alimentación y la cantidad de agua consumida, pudiendo verse reducida si se produce una disrupción del pasaje de alimento por el aparato digestivo.

 

La fermentación de los alimentos por parte del vacuno se produce mayoritariamente en el rumen y la absorción de los nutrientes tanto en rumen como en intestino. Cuando algún componente de la dieta no es fermentado correctamente en el rumen, algún nutriente  no digerido puede llegar al intestino delgado, donde a su vez puede ser digerido y absorbido, pero en el caso de que sea mucha cantidad o que la entrada del mismo sea muy rápida, parte del mismo pasará sin ser digerido y pasará al intestino grueso. En el caso del vacuno, el rol a nivel de digestión del intestino grueso es insignificante. Cualquier partícula de alimento o nutriente que no es digerida y absorbida es excretado en las heces y/u orina.

 

La evaluación y monitoreo de las heces no es una ciencia exacta, ni puede ser utilizada como única herramienta de evaluación, simplemente es una herramienta más, que junto con otras como condición corporal, rumia, producción......, nos permitirá sacar conclusiones sobre el funcionamiento de las raciones en el ganado vacuno de leche.

 

 

Los tres parámetros a observar en la bosta: color, consistencia, y contenido

Color

El color es influenciado por el tipo de alimento, concentración de bilis, y por la digestión y velocidad de pasaje ruminal del alimento.

Normalmente es verde oscura cuando los animales pastorean o comen forraje fresco, y se torna más oscuro hacia un marrón-aceituna cuando consumen dietas secas a base de heno. En caso de dietas unifeed, con alto contenido de pienso y/o grano (silo de maíz), generalmente las heces son amarillenta-aceituna, en estos casos suele variar con el porcentaje de grano, y el procesado del mismo.

En el caso de animales con diarrea, las heces pueden variar a un grisáceo verdoso, en el caso de animales medicados el color puede variar según el medicamento administrado, heces oscuras o sanguinolentas pueden ser indicativo de hemorragias intestinales debido a una disentería acuosa, micotoxinas o coccidiosis. Verde brilloso o amarillento, combinado con diarrea puede resultar de una infección bacteriana como salmonela.

 

Consistencia

La consistencia de las heces, básicamente, depende del contenido de agua, lo cual a  su vez es función dela humedad del alimento y la cantidad de agua consumida.

Las heces normalmente tienen una consistencia pastosa, y forma al caer una pila de 2,5 cm a 5 cm. (FOTO)

 

 

 

Las diarreas producidas por infecciones, o parásitos pero también pueden resultar de una extensa fermentación de carbohidratos en el intestino grueso e incremento en producción de ácidos. (FOTO)

 

 

 

Heces blandas también pueden resultar por u exceso de ingestión de proteína o niveles elevados de proteína degradable; esto es debido al incremento del consumo de agua con el fin de aumentar la excreción de nitrógeno vía orina.

También se podrían ablandar en épocas de estrés calórico. Si se disminuye el consumo de proteína o de agua las heces son más duras. En caso de una deshidratación las heces pasan a ser unas bolas duras, con bajo contenido de humedad (aspecto de bosta de caballo). (FOTO)

 

 

 

Las vacas con desplazamiento a la izquierda suelen tener heces de aspecto pastoso.

 

Contenido:

Lo ideal sería observar una digestión uniforme y utilización de los alimentos de la ración, en caso de observar material no digerido como grano o fibras (trozos mayores a 1cm), es un indicativo de que existe un problema en la fermentación ruminal y posiblemente en el ID e IG o que el alimento pasa a demasiada velocidad por el rumen, lo cual se puede deber a una inadecuada ingestión de fibra efectiva que provoca una disminución de pH ruminal o la no estimulación de la rumia. En el caso de observar mucho grano en las heces, puede ser indicativo de grano mal procesado, en el caso de silo de maíz grano muy pasado, también puede haber grano sin digerir en forma de harina, lo cual es difícil de observar, mirar cuidadosamente el color amarillento puede ser un indicativo ce su presencia, un color blanquecino en la superficie en bostas secas puede indicar almidón son digerir, y la intensidad del blanco indica la cantidad de almidón sin digerir. La presencia de cantidades excesivas de mucus indica una inflamación crónica de los tejidos intestinales. Mucina, puede ser observada en estos casos, que se debe a daños en el intestino grueso, posiblemente causado por una fermentación excesiva y bajada de pH del intestino grueso. La mucina es producida por las células de la pared intestinal, con el fin de reparar la zona afectada. Las heces pueden aparecer espumosas o con burbujas, en cuyo caso es un indicativo de acidosis láctica o exceso de fermentación del IG resulta en producción de gas.

 

 

Análisis físico

 

Para evaluar el estado general de las heces del rebaño, caminar entre los animales y observar el bosteo de cada grupo de animales. Observar bostas recientes, la altura de las bostas y su consistencia, es normal que en el grupo haya variaciones entre animales, incluso entre la bosta de la noche y la del día, debido a la variación de ingestión, consumo de agua y actividad. Por ello en caso de existir variación en la consistencia de las heces puede ser un indicativo de falta de comida, o practicas de manejo o problemas de salud que están afectando de manera desigual a los animales.

 

Coja por lo menos 5 muestras de distintas bostas, mezcle y colóquelas sobre un tamiz de entre 2 y 3 milímetros, haga correr agua sobre la bosta moviendo suavemente, continuar hasta que el agua pase clara, luego observar el material que queda en el tamiz:

Partículas de fibra blanda — Es inevitable que aparezcan algunas partículas de este tipo, pero si la mayoría son superiores al centímetro, debemos tener cuidado, puede deberse a una pobre digestión del forraje, o a que la fibra es de muy mala calidad.

Partículas de grano — Algo de grano siempre se verá en la bosta de raciones de alta producción, fundamentalmente por el alto consumo. El porcentaje de grano en la ración y la velocidad de pasaje del mismo por el rumen, al igual que el procesado previo serán factores a tener en cuenta a la hora de sacar una conclusión.