SERVICIO DE ALIMENTACIÓN Boletín InformativoAño 2013, Nro 4
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- Publicado o Venres, 12 Abril 2013 01:00
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Precios de Leche:
Con sus ventajas e inconvenientes, nos vamos acostumbrando a que el representante de la central lechera pase por las explotaciones a que el propietario firme el contrato para los siguientes meses.
De esta manera, ya se están firmando los contratos para el trimestre abril-junio y se observa estabilidad en el precio; los contratos se firman con los mismos precios que el trimestre anterior y podemos hablar de un precio para cuotas de 500 Tm/año de 33-34 céntimos/litro, calidades aparte.
Materias Primas:
Continúa el goteo a la baja en el precio de las materias primas. Si tomamos como referencia la lonja de Lleida (Mercolleida) de las dos últimas semanas, podemos ver que la harina de soja 44% disponible reduce su precio en 24€/T, (de 430€/Tm a 406€/Tm), con unas previsiones para el mes de Mayo de 392€/Tm; el maíz y la cebada tienen un precio más estable y prácticamente no experimenta variación manteniéndose en el entorno de los 240€/Tm.
Esto se traduce en una estabilidad en los precios de las mezclas en el mercado local para este mes de abril.
La tendencia en el mercado internacional es bajista, pero como nadie está comprando, es difícil prever dónde está el fondo de esta bajada a futuro.
No se sabe como influirá los casos de gripe aviar detectados en Asia y que han provocado la muerte a varias personas en China. Si se diera una bajada en el consumo de carne de pollo en el gigante asiático, se daría una reducción en su enorme demanda de soja, con la consecuente reducción en su precio.
Preparándonos para sembrar el maíz
El maíz es una planta de países cálidos que necesita de altas temperaturas y elevada iluminación para poder desarrollar su gran actividad fotosintética; es particularmente sensible a la falta de agua en el entorno de la floración, desde 20-30 días antes hasta 10-15 días después. Para su siembra, la Tª debe ser superior a 10º, siendo 15º la Tª ideal. Es una planta muy sensible a la asfixia radicular y no soporta los suelos apelmazados o con mal drenaje.
El maíz es un cultivo muy exigente en nutrientes, siendo mayor su demanda en los momentos de mayor crecimiento vegetativo.
La falta de Nitrógeno (N) compromete la formación de la espiga, ocasionando deformaciones y reducción en el tamaño de la misma; además, provoca desecación de las hojas en forma de V (desde la punta a la base de la hoja, dejando verde pálido los bordes
El fósforo (P) es esencial para un buen establecimiento del cultivo; favorece el desarrollo del sistema radicular, mejorando la absorción del agua y de los elementos minerales presentes en la solución del suelo; la falta de fósforo proporciona un color rojo-violeta a las plantas jóvenes.
El potasio (K) interviene en la salud vegetal, consiguiendo plantas más resistentes, tanto a enfermedades como a la falta de agua. Es el responsable de que todos los granos fecundados lleguen al momento de la cosecha en buen estado sanitario y de desarrollo. La falta de potasio se manifiesta con desecación de los bordes de las hojas.
Para un correcto abonado, es muy recomendable analizar la tierra, sobre todo para conocer las necesidades de encalado. El aporte de cal, disminuye la acidez del suelo y favorece la absorción de los abonos; estos no serán bien aprovechados por el cultivo si no se corrige la acidez del suelo.
Una parte importante de las necesidades de abonado del maíz se pueden cubrir con el purín de la propia explotación. Los aportes de nutrientes a través del purín son muy variables ya que hay gran variedad en la materia seca del mismo y hay una correlación entre la materia seca y el contenido en nutrientes.
Además, la eficiencia de utilización del N del purín varía según la forma de aplicación (90% si es inyectado, 40% aplicado en superficie sin cubrir).
En la siguiente tabla vemos las necesidades de abonado del maíz y los aportes de purín
Fuente CIAM
Al principio del cultivo,la absorción del N es lenta, pero se acelera con la aparición de la sexta hoja. La planta absorbe el 75% de sus necesidades durante la fase de formación de la espiga. El N se puede perder por lixiviación, por lo que lo ideal sería aplicarlo en el momento en que la planta lo demande pero resulta bastante incómodo. Una posible solución es el uso de N en abonos llamados de “liberación lenta, dentro de los cuales debemos diferenciar distintos productos que podemos encontrar en el mercado:
Abonos de liberación lenta: Son productos nitrogenados que sufren descomposición microbiana. Estos abonos contienen sustancias que inhiben temporalmente la nitrificación, lo que favorece la liberación lenta duradera del nitrógeno amoniacal del abono.
Abonos de liberación controlada: Son productos nitrogenados recubiertos o encapsulados. La disolución del fertilizante se produce a medida que el agua atraviesa el recubrimiento
Ejemplo de cálculo de dosis de abono mineral con un abono tipo 20-10-10 (N,P,K).
1.- Aplicando 30 Tm de purín y enterrado en menos de 4 horas (eficiencia del N del 90%)
2.- Aplicando 30 Tm de purín sin enterrar con eficiencia de un 60%
Vemos que las necesidades de abono mineral varían en función del manejo del purín y del uso o no del mismo.
(1) En el cálculo de las necesidades de fertilizante químico habría que considerar los niveles de P y K que hay en el suelo; de este modo, las necesidades de abono para cubrir estos nutrientes se reduce considerablemente.
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